¿Qué has hecho hoy para mejorar la calidad del mundo? ¿Has dado tu luz? ¿O acaso, has aportado al mundo en que vives un poco más de sombras? Pregúntate lo. Y si eres un sembrador de sombras, un productor de tinieblas, quiero que sepas que tienes a tu disposición una Inmensa Claridad, un Deslumbrante Resplandor. No tienes más que abrir tu corazón y el haz luminoso del Espíritu Santo inundará tus centros de percepción. Entonces, todo cambiará alrededor de Ti: Vivirás en la alegría, en un desbordante entusiasmo porque tendrás la sensación de aportar al mundo y a los seres que te rodean algo tan necesario a su vivir, como el aire: el Amor.
Llámame, aproxímate a Mi, y ese bienestar que tengo para Ti será tuyo. Cuando hayas bebido mi fuego, los objetivos materiales desaparecerán de tus estrategias y serás un Obrero del Templo del Espíritu. Trabajarás para mejorar el mundo, darás tu Luz a otros y en Ti se alojará permanentemente la Felicidad.